«Los enfrentamientos entre la población musulmana uigur y las fuerzas de seguridad chinas en la región occidental de Xinjiang dejaron un saldo de, al menos, 140 muertos y más de 800 heridos. […] No se puede obviar que los uigur son musulmanes. Eso ha sido utilizado por Pekín para ejercer la represión en nombre de la “guerra contra el terrorismo”, argumento que carece de base. […] Cabe esperar que la comunidad internacional redoble sus esfuerzos para instar a China a que se comprometa a respetar los derechos humanos» (La Razón, 7.7.09).
Traducción
«Las masacres de musulmanes por parte de Estados Unidos son guerra contra el terrorismo; las realizadas por China son agresiones a los derechos humanos».
Traducción
«Las masacres de musulmanes por parte de Estados Unidos son guerra contra el terrorismo; las realizadas por China son agresiones a los derechos humanos».